El marcado descenso de los niveles de vacunación en niños y adolescentes de Argentina puso en alerta a los profesionales de la salud y las asociaciones médicas. Los datos oficiales indican que vacunas clave, como las que previenen la poliomielitis, el sarampión o la difteria, entre otras enfermedades, cayeron a tasas de aplicación inferiores al 50%, cuando hasta hace pocos años superaban el 90%. “Las bajas coberturas de vacunas esenciales ponen en riesgo la protección comunitaria y favorecen la reemergencia de enfermedades eliminadas”, advierte la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP).