Ha sido en el Reino Unido, uno de los países que más firmeza demostró desde el principio contra la agresión rusa en Ucrania, donde Donald Trump ha admitido de nuevo que Putin le ha “decepcionado”. Siempre pensó que la solución de ese conflicto sería sencilla, ha dicho en una rueda de prensa conjunta con el primer ministro, Keir Starmer, pero “las guerras son algo diferente, y ocurren cosas que acaban siendo lo contrario de lo que tú pensabas”, ha reconocido.